En Casa Roble, jardín infantil en Las Condes, el verano no solo es una época de calor y juegos, sino una oportunidad para aplicar los principios de la metodología Waldorf y permitir que los niños descubran, exploren y crezcan en un entorno lleno de aprendizaje y creatividad.
Conexión con la Naturaleza y el Juego Libre
Durante el verano, los pequeños corren descalzos sobre el césped, sintiendo la frescura de la hierba bajo sus pies. Estos momentos permiten que conecten con la naturaleza de manera profunda, mientras disfrutan de la libertad que caracteriza nuestra metodología. En el rincón de la arena, las manos pequeñas construyen castillos y montañas, dejando que sus imaginaciones vuelen, y bajo la sombra de un bosquecito, los juegos y relatos fomentan su concentración y creatividad.

Actividades al Aire Libre: Aprender Haciendo
El calor y el buen tiempo nos inspiran a realizar actividades al aire libre. Desde regar las plantas hasta lavar la loza y la ropa de muñecas, estas tareas cotidianas ayudan a los niños a imitar acciones reales de la vida, una práctica fundamental en la pedagogía Waldorf. Además, teñimos gasas para las estaciones venideras, conectando el presente con el ciclo natural del año.
Las acuarelas, los colores y la creatividad también tienen un papel especial en esta época. Por ejemplo, trabajamos con el color amarillo, que simboliza la transición hacia el rojo otoñal. Este enfoque artístico fomenta una comprensión emocional y visual del cambio de estaciones.
Energía, Juegos y Comunidad
El verano es una época de energía desbordante. Juegos de patio, rondas al aire libre y actividades grupales no solo fomentan el desarrollo físico, sino que también ayudan a crear un «alma grupal» entre los niños, fortaleciendo el sentido de comunidad en nuestro jardín infantil en Las Condes.
Descubrimientos en Familia
Aprovechamos el verano para aumentar los paseos al aire libre. Recomendamos visitar parques, paseos y pequeños riachuelos donde los niños pueden refrescarse y explorar. Las escapadas a la playa son ideales para recolectar «tesoros» que luego compartimos en las mesas de estación, una tradición importante en la metodología Waldorf.

Acompañar desde el Ejemplo
Como adultos, nuestro rol es proveer imágenes inspiradoras para los niños. En verano, podemos acompañarlos desde el genuino disfrute y entregarnos a la contemplación presente. Esto no solo enriquece su aprendizaje, sino que también nos regala momentos únicos de conexión y belleza.
En Casa Roble, fomentamos un verano lleno de aprendizajes, creatividad y, sobre todo, experiencias significativas. Jardín infantil en Las Condes, donde cada estación es una oportunidad para crecer y florecer en armonía con los ritmos de la naturaleza.
Ven a conocernos: Gertrudis Echenique 485, Las Condes o bien contáctanos aquí.

Con cariño,
Claudia Guerrero